Consideraciones sobre el relato y el tono en las RRSS. 5 recomendaciones.

Todo el mundo desea gustar en las redes sociales. Si puede ser, mucho. Y aunque en demasiadas ocasiones se concentren todos nuestros recursos, capacidades y esfuerzos en conseguir esa imagen genial o ese vídeo impactante que nos hagan obtener una buena pizca de éxito social media, dedicando una cantidad muy secundaria de tiempo a trabajar la calidad del copy que tiene que acompañar a tal logro visual o audiovisual, lo cierto es que, como ya os habíamos comentado al hablar sobre el storytelling y el oficio de copywriter, escribir bien es un deber inexcusable, casi mejor una obligación, si nuestro objetivo es construir y mantener una buena comunicación en redes sociales.

Escribir bien… ¿Cómo?

¿Pero qué es eso de escribir bien, exactamente? ¿Redactar cada texto manteniendo a rajatabla el uso más correcto de la ortografía y gramática del idioma que empleamos en nuestra comunicación? Pues algo de eso hay, aunque no seremos nosotros quienes dudemos de que si lo que lo que de verdad deseas a la hora de publicar en tu red social favorita es pasar un buen momento, o hacérselo pasar a tus fans, pues quizás no te importe demasiado tu “cómo” a la hora de construir tu “qué” en un “cuándo” y “dónde” concretos.

Sin embargo, si consideras que la calidad textual es un pilar indiscutible de tu comunicación escrita, y sobre todo si detrás de ti está una marca o institución, sí que es necesario tener muy en cuenta además de la corrección en el uso de las normas que rigen el empleo del idioma, que escribir bien también consiste en entender que la creación del relato junto con el uso de un tono textual acertado son un aspecto consustancial al propio contenido. Es algo transversal que se superpone y se complementa a la vez. Es algo intrínseco e inevitable. Y es algo que hay que trabajar bien. Pues bien, de esto es de lo que os queremos hablar aquí y ahora.

El relato y el tono

Por definición, llamamos relato al cuento o narración de carácter literario, generalmente breve y, por extensión, a toda acción que implique transmitir el conocimiento sobre un acontecimiento, real o ficticio, a través de la palabra oral o escrita. En íntima relación con el relato, como os venimos contando, se encuentra el tono, esto es, la inflexión de la voz (oral o escrita) y el modo particular de decir algo según la intención o el estado de ánimo de quien habla, prestando a su vez atención al público al que esa voz se dirige.

No es lo mismo dirigirse al público infantil que al adulto. No es lo mismo tener que modular nuestro nivel de informalidad en función de a quién se representa cuando se escribe que no tener que hacerlo porque nuestro público potencial prefiere un lenguaje más directo. No es lo mismo poder recurrir al humor o a la empatización con la realidad más actual, incluso cuando esta sea trágica, que no poder hacerlo en absoluto.

Tampoco es lo mismo hablar de cocina, de moda, de coches, de política, de deporte, de economía, de diseño de interiores, de salud, de viajes, de estética, de música… y un largo etcétera. Y aunque las rupturas formales y conceptuales puedan resultar un atractivo publicitario en sí mismo, también es verdad que podemos acabar pegándonos el mamporrazo de nuestra vida si nuestra propuesta de transgresión no da en el clavo en absoluto.

 

Recomendaciones a tener en cuenta al redactar en RRSS

Por todo esto que te estamos contando, aquí te dejamos unas pequeñas recomendaciones sobre la construcción del relato y el ajuste del tono en redes sociales. Somos muy conscientes de que son pocas, ciertamente. Pero ser, lo son todas ellas. ¡Esperemos que te sean de provecho!

  1. Construye un relato coherente. No te pierdas en divagaciones ni te centres en aspectos anecdóticos. Querer contar muchas cosas a la vez es acabar contando nada.
  1. Amabiliza tu comunicación. Independientemente del mayor o menor formalismo que desees mantener en el relato, busca el lado amable, estimulante o emocional de lo que deseas contar.
  1. Elige el tono adecuado. No escribas como a ti te gusta leer. Escribe como le gusta leer a tu público potencial. Pero ojo con los “falsos amigos” del lenguaje oral.
  1. Mantén la corrección escrita. La ortografía y la gramática nos juegan muy malas pasadas. Asegúrate de que el aspecto formal de tu relato sea lo más correcto posible independientemente de si el tono es más o menos formal.
  1. Y recuerda: lo bueno, si breve, dos veces bueno. Es algo que debemos tener muy presente en cada uno de nuestros copies. Los textos extensos son una buena excusa para pasar a otra cosa, mariposa.

 

Escribir bien vale la pena. Consideraciones sobre el relato y el tono en RRSS.

No debemos olvidar que, desde que existe la publicidad, las marcas han ido construyendo y difundiendo sus relatos en los diferentes soportes (físicos y digitales) con la clara intencionalidad de impactar en el público y, por tanto, en el mercado. Y pasados ya unos buenos añitos, lo que queda claro es que aquellos relatos y tonos más acertados se han convertido en los mejores embajadores de los productos o servicios que alguien pueda ofrecer, dejándonos una huella plagada de emociones positivas hacia ellos.